Maravillas naturales en Irlanda
Irlanda es un país que destaca por sus impresionantes parajes naturales. Hoy recorreremos algunas de esas maravillas paisajísticas que nos brinda la isla. Desde contemplar el Atlántico en un acantilado hasta pasear por mullidas colinas verdes, las opciones son múltiples.
Seguimos las indicaciones de la web DiscoverIreland para apuntaros algunas de las que no deberíais perderos:
– Acantilados de Moher: ubicados en el Condado de Clare y con una longitud de ocho kilómetros, aportan una de las vistas más impresionantes de todo el país, a 230 metros por encima del mar. También son adecuados para aquellos a quienes les guste pasear por bonitos parajes naturales.
– Playas: los que prefieran el paisaje arenoso podrían dedicirse por la zona de Cork/Kerry, donde se encuentran muchas playas con la categoría de bandera azul. Entre los arenales recomendados podríamos mencionar Inch y Banna en Kerry y Youghal Front Strand y Inchydoney en Cork. En el condado de Kerry se encuentran además dos destacados paisajes, el Ring of Kerry y el Ring of Beara
– Slieve Blooms: en el centro del país, ofrecen un buen lugar para escapadas de relax gracias a sus senderos por el bosque, arroyos de aguas transparentes, rápidas cataratas y verdes cañadas
– Ring of Gullion: se trata de una formación geológica única, un terraplén circular que no se encuentra en ningún otro lugar de Irlanda. Además, Slieve Gullion es considerada la montaña más misteriosa de Irlanda, debido a su vínculo con las leyendas y mitos del país
– Río Shannon: sus 368 kilómetros atraviesan pintorescos pueblos hasta llegar al océano en Limerick. Es además un buen lugar para practicar la pesca y la navegación.
Como veis, son numerosas las maravillas naturales que podéis encontrar en el país. Este artículo es sólo un aperitivo, porque seguro que los que ya habéis visitado Irlanda podríais añadir muchos otros lugares naturales hechos para la ensoñación.

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yo estube ahi hace tiempo con un grupo de estudiantes, y es magnifico. nos asomamos tendidas sobre el suelo para ver el mar, no hay palabras para describirlo